PRIMERA REUNIÓN DE LOS SINDICATOS CON EL CONSEJERO DE SANIDAD

“Ayer por la tarde, el Consejero de Sanidad Faustino Blanco, recibió a los sindicatos profesionales de la sanidad USIPA-SICEPA, USAE, SATSE y SIMPA. En la reunión el Consejero se refirió a la complicada situación económica que atravesamos, con exigencias de reducción del déficit público que vienen impuestas por el gobierno central y que inevitablemente tendrán su repercusión en el ámbito sanitario de Asturias pues no se puede soslayar que el 38% del gasto del Principado es en Sanidad y dentro de ese presupuesto el capítulo de personal es, con diferencia, el más importante.

El Consejero manifestó que habría sacrificios, aunque es voluntad de su Consejería procurar una política realista con el menor impacto posible en el empleo. Asimismo manifestó que no entra en sus previsiones un nuevo recorte salarial. Apostó por el diálogo y la flexibilidad, sin autoengaños, asumiendo todas las partes la realidad de la situación en la que nos encontramos. También a pregunta del SIMPA confirmó que las responsabilidades de la gestión de personal residirán en el SESPA y no en Función Pública, y las de Formación también las asume el SESPA y no el Adolfo Posada.

Por parte del SIMPA manifestamos nuestro agradecimiento por la rapidez con la que atendió la petición de reunión y nos ofrecimos para abordar los difíciles retos que nos esperan con un diálogo franco, leal, continuo y serio, desde las mutuas responsabilidades que tenemos dentro de la organización sanitaria asturiana.

La reunión que tuvo un carácter fundamentalmente protocolario trascurrió en un clima de cordialidad. El SIMPA valora positivamente esta primera toma de contacto y confía en que nuestros nuevos responsables sanitarios tengan en cuenta la voz y la opinión de quienes somos clave en el sistema, los médicos y los facultativos del Principado.”

Lo que cuenta la prensa:

Blanco avanza que el grueso del recorte sanitario será en personal

«No nos engañó: nos dijo que se iban a tocar todos los capítulos del presupuesto y el más importante es ése», explican los sindicatos

Una reunión de presentación que se prolongó durante más de hora y media en la sede de la consejería. Una «toma de contacto que se desarrolló en un ambiente cordial y cargado de buenas intenciones por ambas partes», pero con un duro mensaje de fondo: «Nos puso delante la tarta del presupuesto, nos explicó que hay que recortar e hizo especial hincapié en los gastos de personal». Así resumía ayer tarde el secretario general del Sindicato Médico del Principado (Simpa), Antonio Matador, el primer encuentro entre el consejero de Sanidad, Faustino Blanco, y los sindicatos del ramo. Una cita de la que salieron convencidos de que el grueso del tijeretazo al sistema sanitario se cebará en sus empleados.

Que «el empleo va a sufrir» fue también la inquietud con la que se marchó a su casa Francisco Menéndez, portavoz de celadores y técnicos (Sicepa), quien recurrió a la lógica matemática: «El personal se va a llevar una parte importante del recorte porque, como explicó el consejero, la sanidad supone el 40% del presupuesto regional y la mitad del presupuesto del Sespa se lo lleva el capítulo de personal».

«No nos engañó: nos dijo que se iban a tocar todos los capítulos y el más importante es ése», abundaba Margot Marqués, en nombre de los profesionales de la enfermería (Satse). «El consejero nos recordó que la situación es grave y que las medidas vienen impuestas por Madrid y hay que aplicarlas».

Necesidades imperiosas

Medidas como la ampliación de la jornada, que los sindicatos dan por segura, pero no antes de negociar. «Se va a aplicar en todo el Estado, pero lo que no es de recibo es que haya algunos gerentes que se han querido poner ya manos a la obra», precisaba el portavoz del Simpa que, al igual que sus homólogos, quiso quedarse con la parte más positiva del encuentro: la oferta de diálogo por parte de Blanco.

«Se comprometió a respetar los ámbitos de negociación», apuntó el representante de los médicos, que se fue con la promesa de que la ampliación de 35 a 37,5 horas semanales se discutirá en la Mesa General de la Función Pública.

«La gente está muy preocupada. Hay que tener en cuenta el elevado porcentaje de personal interino», abundó Marqués, que abogó por que «el recorte sea lo menos lesivo posible para el empleo».

Esa es la «máxima preocupación» también para Simpa y Sicepa, cuyo portavoz llegó incluso a plantearle una alternativa al consejero: «Abrir el nuevo HUCA, nos dijo, es una necesidad imperiosa. Para nosotros, lo imperioso es que se mantenga el empleo. A lo mejor hay que esperar un año o dos y que la gente pueda seguir llevando un plato de comida a su casa».

Teniendo en cuenta que la sanidad asturiana suma 15.000 profesionales, las centrales calculan que sólo el incremento de la jornada sanitaria supondrá alrededor de 1.000 despidos.